La forma en que el autor habla de sus experiencias y de otras personas, sobre los campos de concentración, puede ser inferido a situaciones de nuestra actual época, donde hay personas que mueren injustamente, así como lo fue en ese entonces. Así que estas experiencias puede inferir en las actuales, pues al fin y al cabo todos estos eventos tienen un propósito, que aunque sabemos que es muy malo, deja un mensaje para las futuras generaciones, y un acto de esperanza para que no vuelve a suceder.