Las subculturas se desarrollan para reflejar los problemas, las metas y experiencias comunes que comparten los miembros de un equipo, de un departamento o de otra unidad. Una oficina, una sucursal o una unidad que están físicamente separadas de las principales operaciones de la empresa pueden adoptar una subcultura distintiva. Las subculturas, por lo general, incluyen los valores básicos de la cultura organizacional dominante más valores adicionales únicos para los miembros de la subcultura. Sin embargo, las diferencias subculturales en ocasiones pueden conducir a conflictos entre los departamentos, en especial en organizaciones que no tienen sólidas culturas corporativas globales o cuando los valores subculturales llegan a ser muy sólidos y superan los valores culturales corporativos, pueden surgir conflictos que dañen el desempeño de la organización.