Entrada de Pablo en Europa; Filipos Pablo tiene una visión de un varón que le pide rogando que vaya a Macedonia a ayudarlos. Filipos, primera ciudad de la provincia de Macedonia, Lidia primera mujer convertida en Europa, Pablo en el nombre de Jesucristo echo fuera el Espíritu de adivinación de una mujer y como sus amos vieron que ya no podrían ganar dinero con ella, acusaron a Pablo y Silas, los azotaron y encarcelaron. A medianoche, orando Pablo y Silas sobrevino un gran terremoto y se abrieron las puertas y se soltaron las cadenas; el carcelero se despertó y vio las puertas abiertas, para su sorpresa Pablo y Silas estaban ahí. El carcelero al ver esto, se arrodilla y les pregunta "¿Qué debo hacer para ser salvo? y ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa." (Hechos 16:31-32), él creyó y los llevo a su casa, fue bautizado al igual que su familia y se regocijaron todos. Al día siguiente, Pablo y Silas son liberados, pero Pablo los acusa de haber azotarlos públicamente sin una sentencia judicial, mandarlos a la cárcel siendo ellos ciudadanos romanos. Pedían que vengan los Magistrados a sacarlos y fueron, les rogaron que se vayan de la ciudad. Pablo y Silas van a la casa de Lidia donde los consolaron y se fueron.