Para el 2 de octubre estaba planeada una movilización que iría de la Plaza de las Tres Culturas al Casco de Santo Tomás, la cual fue suspendida momentáneamente por la reunión que por la mañana sostuvo una delegación del Consejo Nacional de Huelga con Andrés Caso y Jorge de la Vega Domínguez, representantes del Presidente de la República. Esta negociación no llegaría a ningún lado.
De forma paralela, se montaron operativos de vigilancia en distintos puntos de la ciudad, como el Reloj Chino, la Plaza de las Tres Culturas, Zacatenco, el Casco de Santo Tomás, la Ciudadela, etc.
En el transcurso de la tarde, varios contingentes de estudiantes fueron arribando a Tlatelolco, donde se llevaba a cabo un mitin con una asistencia de entre 6 y 15 mil personas.
En los alrededores se encontraba apostado el Ejército Mexicano, con unidades de asalto, jeeps y tanques ligeros, además de miembros del Batallón Olimpia (grupo paramilitar donde los miembros se identificaban ente sí por un pañuelo o guante blanco en la mano izquierda) que se encontraban infiltrados en la manifestación.
A las 17:30 horas se informó que la marcha programada al Casco de Santo Tomás se suspendería.