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Empatía y respuestas afines en niños - Coggle Diagram
Empatía y respuestas afines en niños
El concepto de empatía
Borke, Buckley, Siegel y Ness, Greenspan, Barenboim y Chandler definen la empatía como la habilidad cognitiva para reconocer y comprender los pensamientos, las perspectivas y los sentimientos de otro individuo.
Balson, Coke, Hoffman, Sawin,Staub, Stodlan dicen que la empatía es la experiencia vicaria de una emoción que es congruente con la de otro individuo.
La integración de los modelos cognitivos y afectivos destacan en los modelos de la expresión y el desarrollo de la empatía en los niños.
Según el modelo de tres componentes de Feshback, una respuesta empática requiere:
La capacidad de adoptar la perspectiva o rol del otro.
La evocación de una respuesta afectiva compartida.
La capacidad de identificar y discriminar los estados emocionales del otro.
El modelo de Hoffman intenta explicar cómo los factores cognitivos y afectivos desempeñan roles variables e interactivos en el desarrollo social y moral del niño.
La relación entre empatía y conducta prosocial
Se suele usar el test FASTE de Feshbach para medir la empatía.
El test consiste en cuatro pares de secuencias que muestran a niños en situaciones diseñadas que pueden causar alegría, tristeza, enfado y miedo.
Tras cada secuencia se le pregunta al niño "¿cómo te sientes?" y las respuestas son valoradas según en que se parecen al afecto del niño.
El uso de indicadores no verbales de activación emocional en las investigaciones sobre la relación de la empatía-conducta prosocial se está generalizando más y los resultados son esperanzadores.
La empatía ha sido considerada frecuentemente como un elemento mediador de otras respuestas interpersonales.
Algunos trabajos han demostrado que las experiencias estructuradas que fomentan la adopción de roles y sensibilidad de emociones pueden facilitar expresiones de ayuda.
Los resultados fueron que la activación de empatía puede estar relacionada con la conducta prosocial de los niños.
Algunos investigadores consideran que la relación empatía y conducta prosocial es una preocupación primordial dentro del desarrollo afectivo e interpersonal.
Posibles efectos por la empatía:
Mayor competencia emocional
Mayor compasión
Benevolencia
Regulación de agresión y otros comportamientos antisociales
Comprensión social
Autoconciencia más viva
Regularidad y diferencias individuales en el desarrollo
Los niños pequeños pueden diferenciarse marcadamente en su capacidad o en su disposición a ser sensible y responsivos ante los sentimientos de otros.
Factores de socialización
La socialización en la empatía
La respuesta empática primitiva del infante puede sugerir que los seres humanos cuentan con una capacidad innata para responder a claves evidentes de malestar en otros.
Las experiencias socializadoras tempranas influyen en la supresión o el florecimiento de esta capacidad durante la infancia.
Apego temprano
Un precursor temprano de la empatía tiene que ver con la intensa relación afectiva entre el bebe y su cuidador.
Existen numerosos factores que influyen en la medida en que un niño concreto se vincula con la seguridad a sus padres.
El grado de responsividad parental al llanto o a otros malestares, pueden tener un componente afectivo dominante y ser sumamente relevantes para el desarrollo de la empatía.
Los patrones de intercambio verbal, pueden ser menos significativos.
Utilización parental de la técnica de socialización inductiva
Como resultado de una investigación de Zahn-Waxler se halló que en altos niveles de responsividad emocional iban asociados con madres que ofrecían al niño un claro mensaje cognitivo y reforzaban ese mensaje con una expresión intensa de emoción.
Una reacción muy emocional de la madre genera importancia por parte del niño.
La técnica disciplinaria inductiva tiende a reforzar tendencias empáticas del niño.
Apego parental
El afecto parental es satisfacer las necesidades emocionales del niño.
Los individuos que difieren en cuanto a su disposición empática pueden tender a distorsionar las características o los estilos sociales de sus padres.
La disponibilidad de modelos empáticos
Se asume que el desarrollo de dichas respuestas se intensificaría en la infancia en modelos que expresan sensibilidad y compasión hacia el niño.
Tomkins dice que los padres emocionalmente expresivos enseñan a su hijo a expresar su malestar sin vergüenza y responder con simpatía al malestar de otros.
Barnett, King, Howard y Dino, después de una investigación, averiguaron que cuando la madre es más empática que el padre, la empatía puede asimilarse como algo propio del género femenino y se desarrolla en chicas jóvenes.
Existen pocas investigaciones específicas que miden cómo la observación de un modelo empático o simpatético influye en la expresión de respuestas similares en un observador joven.
No solo los padres son importantes para el desarrollo socio-emocional de los niños, sino también maestros, hermanos o compañeros de juego, también personajes televisivos.
Formación de la percepción de la semejanza con otros
Los niños responden con mayor empatía a modelos que perciben como semejantes.
Semejanza con: Sexo, raza, experiencia compartida.
El animar a un niño a percibir a otros como semejantes a él mismo puede contribuir al desarrollo y a la expresión de la empatía.
Al madurar los niños sienten empatía al percibir semejanzas abstractas.
Para incrementar la percepción de semejantes de los niños con otros se debe dar un aumento de sus opciones a comparar.
Hoffman: Los padres deben permitir a sus hijos estar expuesto a una amplia gama de experiencias y emociones a fin de estimular su sensibilidad ante los sentimientos ajenos.
Un niño protegido a experiencias desagradables y desanimado a manifestar expresiones abiertas de malestar es probable le resulte difícil empatizar con otros.
Lenrow: Los niños que lloran más tienden a ser más empáticos con lo que menos lo hacen.
Feshbach: la responsividad y la servicialidad empática puede ser mayor en algunos debió a una experiencia funesta.
La percepción de las semejanzas que el niño tiene hacia otros puede fomentarse también impulsando creencias y valores universales.
Según la teoría de Hoffman, existe una consistencia evolutiva entre los niños, entre su sensibilidad emocional y su sensibilidad a las necesidades de otros.
La desaprobación de la excesiva competitividad interpersonal
Los muchachos muy competitivos tienen a ser menos generoso y menos empáticos que sus compañeros menos competitivos.
Feshbach: Un énfasis de la competición por parte de los padres aparecía asociado con bajos niveles de empatía en los hijos, pero no en las hijas.
El fomento de una la orientación interpersonal marcadamente competitiva puede generar en el niño una excesiva preocupación por sí mismo e interferir con su inclinación a responder a las necesidades de otros.
El fomento de un autoconcepto positivo
La empatía en las niñas se correlacionaba positivamente con tolerancia y permisividad maternas; y negativamente con conflictos, rechazo, castigos y control excesivo por parte de la madre.
Los niños que puntuaban alto en la expresión de emociones alegres puntuaban también alto en conducta empática hacia los compañeros.
Feshbach: la empatía en las niñas está asociada con antecedentes maternales que tienden a promover la conducta prosocial y una autoimagen positiva.
Un aspecto del auto-concepto positivo que puede ser especialmente útil en el desarrollo de la empatía es la percepción de uno mismo como sujeto servicial independiente y competente.
Strayer: halló que la empatía de niños de 6 años está asociada a un autoconcepto positivo.
Los niños tratados de manera poco cariñosa y perjudicial para si auto – concepto saludable estarán lógicamente menos inclinados a mostrar una conciencia y sensibilidad frente a las emociones de los demás.
Los niños que se les anima a tener una buena opinión de sí mismos pueden estar más inclinados a empatizar con otros que los niños que se preocupan de inadecuaciones personales.
Whiting y Withing: la asignación a los niños de responsabilidades concretas de cuidar a sus hermanos más pequeños tiende a aumentar el nivel general de su sensibilidad hacia otros.