De acuerdo con Milton Erickson... ...los pacientes que van a consultarlo, lo hacen porque no saben exactamente POR QUE van. Tienen problemas, y si supieran en qué CONSISTEN no habrían ido a verlo a usted. Y puesto que no saben lo que REALMENTE son sus problemas, tampoco pueden decírselo. Sólo pueden proporcionarle una narración más bien confusa de lo que ellos piensan. Usted escucha con SU propia perspectiva y no sabe lo que le están diciendo, pero sabe mejor que no lo sabe. Y entonces tiene que hacer ALGO que induzca un cambio en el paciente... cualquier cambio pequeño, porque ese paciente quiere un cambio, aunque sea pequeño, y lo aceptará COMO un cambio. No pretende medir la EXTENSIÓN de ese cambio. Lo aceptará como un cambio y entonces seguirá a ese cambio, y el cambio se desarrollará de acuerdo con sus propias necesidades... Esto se parece mucho a echar a rodar una bola de nieve por la ladera de una montaña. Empieza como una pequeña bola, pero a medida que rueda se hace cada vez más grande... y se convierte en una avalancha que se ajusta a la forma de la montaña.