Se trata de una opinión basada en criterios irracionales, en la pulsión de los sentidos, de un constructo, la masa, incapaz de reaccionar críticamente frente a la acción externa. Esta idea de la opinión pública deriva, como es obvio, de una concepción enormemente negativa de las masas y del hombre – masa.
La psicología de las multitudes tiene sus orígenes en la obra de Gustave Le Bon (Psicología de las masas), que considera a las masas como entes compactos, carentes de moralidad, que se mueven por impulsos sentimentales y son fácilmente manipulables por el líder de masas