Incluir antecedentes personales y familiares de atopia, características de los síntomas (tipo, duración, intensidad, horario), enfermedades asociadas (fundamentalmente conjuntivitis, dermatitis atópica y asma), factores desencadenantes (estacionalidad, exposición a animales, factores ocupacionales, irritantes inespecíficos, segunda vivienda, actividades de ocio, fármacos, etc.), respuesta al tratamiento administrado y aparición de posibles complicaciones.