Cuando ambas pupilas son de diferente tamaño, es decir asimétricas, ante el mismo estimulo de luz, se llama anisocoria e indica daño cerebral. Las causas de este daño pueden ser: hemorragia intracraneal, tumores cerebrales, meningitis, traumatismos, medicación oftalmológica, parálisis. También puede ser congénito y presentarse desde la infancia.
La forma de examinar es con el uso de una linterna que se comercializa para dicho fin. Se hace incidir la luz sobre la pupila y se observa la respuesta, la misma que es contracción.