Cuando una persona se infecta con VIH, el virus ataca y debilita al sistema inmunitario. A medida que el sistema inmunitario se debilita, la persona está en riesgo de contraer infecciones y cánceres que pueden ser mortales. as consecuencias psicológicas en personas con VIH-SIDA se dan tanto en el plano psicológico como social, y pueden provocar gran malestar, interfiriendo en el bienestar de la persona: tristeza o estados depresivos, fatiga, temor, ira, culpa, aumento de violencia familiar por un alto estrés, ruptura de relaciones, etc...