CARACTERISTICAS
El aroma debe ser muy limpio, puro, sin predominio de otros, más allá del alcohol como aroma primario. En segunda instancia, muy sutilmente se deberían percibir las notas características de cada marca (cítricos, nuez, etcétera). Su aspecto lo apreciamos al impregnarse en la copa. Debe ser límpido, cristalino, parecer sedoso, tener “piernas”. Sobre el sabor se distinguen dos tiempos: entrada en boca/paladar, y final. Según el tipo de Vodka debe ser ligero, acuoso o viscoso. A estos últimos, los de mayor densidad generalmente, se les aprecian más al degustarlos casi helados, pues su viscosidad se atenúa y su suavidad se aprecia con mayor claridad. También el final adquiere una nueva dimensión con los cambios de los sabores más persistentes, que van apareciendo al tomar temperatura en el paladar.