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CIVISMO Y FORMACIÓN ÉTICA: Grandes ausentes frente a enormes problemas -…
CIVISMO Y FORMACIÓN ÉTICA: Grandes ausentes frente a enormes problemas
Civismo, formación cívica,
formación ciudadana
María Eugenia
Luna.
El civismo y la formación ética que se imparten en las escuelas se ha reducido a la enseñanza de conceptos sobre:
Democracia
El aprendizaje memorizado de datos.
La información de simples procesos de participación ciudadana
Personajes y
fechas
Conjunto de temáticas relacionadas con la vida común; en las escuelas debería prevalecer un enfoque de formación ciudadana, la cual tendría que fomentarse desde los primeros años de la vida.
Dado que las sociedades cambian, la formación ciudadana y sus enfoques no son estáticos: estos van cambiando con el tiempo, pues se van adaptando a las necesidades y contextos por los que atraviesa cada generación.
Formación docente, currículo y padres de familia: los retos del sistema educativo
En la actualidad, los docentes viven un
escenario desalentador y conforma
un entorno donde difícilmente se puede educar en la paz y los valores:
Caos
Violencia
Contextos sociales adversos,
Problemas económicos y laborales
Carro señala: necesario retomar contenidos pertinentes en la materia, a fin de enfrentar estas complejas circunstancias; es indispensable, que la reforma educativa elimine las presiones con las que actualmente trabajan los maestros
En la casa también se educa
El profesor Jesús Pérez Varela, opina que la escuela no es el único lugar donde se forman ciudadanos, por lo que el trabajo para lograrlo debe comenzar desde el hogar y el entorno en el que se desarrollan los niños.
El experto señala que el sistema educativo enfrenta el reto de formar en valores.
Para conseguir este objetivo es necesario pugnar por el establecimiento de un vínculo estrecho entre la escuela, el hogar y el entorno de los educandos.
Al convivir con alumnos de diversos contextos y situaciones socioeconómicas los docentes enfrentan el reto de lograr una base para la enseñanza de la formación cívica y ética.
El principal desafío es la sensibilización de los padres de familia.
Formación ciudadana
para docentes
Laura Cariño considera que uno de los retos más importantes para los profesores es apropiarse de los contenidos de formación cívica y ética, para así contagiar a los estudiantes un ambiente de respeto y justicia.
En su opinión, otro reto es el contexto
y los contenidos que se pretenden impartir:
“Los maestros, al egresar de la Escuela Normal, encuentran contextos y situaciones que muchas veces no se adaptan a lo que se pretende enseñar, por lo que la pertinencia del currículo dependerá de la habilidad del docente para impartirlo”.
Advierte que es necesario trabajar más en el ámbito emocional y en la generación de ambientes formativos.
Desde la escuela
Según Álvaro Aragón Rivera, a pesar de los avances en los contenidos de la asignatura hay ciertos dogmas del antiguo civismo que no han sido erradicados. Pese a la actualización de los programas, se sigue haciendo énfasis en el discurso de la identidad nacional como elemento de unidad.
Aragón Rivera coincide con las opiniones de la mayoría de los docentes:
“La escuela por sí sola no puede desarrollar las habilidades y actitudes necesarias para generar una cultura democrática. Es decir, sería un error pensar que basta la educación escolar para hacer democrática una sociedad. Lo que sí puede hacer, en todo caso, es apuntalar esos valores, que son condición necesaria para el correcto funcionamiento de una sociedad democrática”.
De acuerdo con los Programas de Estudio publicados por la SEP, la Formación Cívica y Ética que se brinda en la educación básica se organiza en tres grandes ejes formativos:
Ética
Ciudadanía
Persona
El acoso, producto de la mala convivencia escolar
Guillermo Levine comenta que, si bien el acoso escolar es un problema social, no puede, ni debe, tratarse únicamente desde esa perspectiva, ni a partir de acciones y estrategias de control de daños.
El acoso es un signo de descomposición social, pero también es un síntoma individual.
Para lograr una correcta convivencia en las escuelas, es necesario apoyar al estudiante a tener en cuenta cuatro premisas:
Respeto por los demás
Cuidado por el ambiente
Contacto consigo mismo
Preocupación e interés por las normas, la autoridad y las convenciones sociales.