El discurso del Secretario General de la ONU fue claro al instar a las corporaciones a guiarse por un conjunto de valores fundamentales que implicaran cambios positivos en sus actividades comerciales. Para ello, lanzó el llamado Pacto Mundial, un tratado en el que se promovieron diez principios aplicables al ámbito empresarial. La premisa en la que descansa este tratado es coadyuvar a la sustentabilidad, considerando los derechos humanos y laborales, medio ambiente y políticas anticorrupción. El acuerdo persigue dos objetivos: El primero trata de incorporar los principios del pacto en las actividades empresariales que las corporaciones realizan tanto en el país de origen como en sus operaciones alrededor del mundo. El segundo impulsa acciones que apoyen los objetivos de desarrollo de Naciones Unidas, en especial los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODMs), a través del diálogo sobre políticas, capacitación y la alianza para proyectos y participación.