La ansiedad y/o la ira se pueden mostrar mediante el tono de voz, la tensión en los músculos faciales, dientes apretados, la forma como sujeta los objetos, las pupilas dilatadas, una actividad corporal general en vez de la tranquilidad, una postura rígida, la transpiración, las miradas de soslayo, o las miradas evasivas