·Deben ser escritos en un lenguaje claro, preciso y sencillo, además, su función dominante es apelativa (que pretende influir en el comportamiento del lector.
·Es frecuente la presencia de explicaciones breves e imágenes que aclaren el contenido del texto.
·También son habituales los marcadores que expresan orden (números, letras, puntos, adverbios o locuciones adverbiales de tiempo: en primer lugar, después, a continuación, por último…).
·Aparecen tecnicismos y las oraciones son simples.