Ejemplo: El estupor de aquella presencia que me explica la existencia del ser de algo que origina el orden del todo, la atracción de lo bello que es ese todo y lo beneficioso que es gracias a Él; entonces, esto que es evidente, me hace reflexionar, el ser, mi existencia no me lo es dado por mí, sino, soy algo dado por aquel ser que hizo posible toda la evidencia del ahora. Yo soy «hecho»