Frente a la desintegración del "desarrollo", la comunicación participativa comenzó a hacer propuestas pero únicamente profundizando y actuando a pequeña escala mundial. Desde los 90', este tipo de comunicación, resurgió con fuerte críticas, planteando una nueva orientación: la Comunicación para el cambio social, este como un "proceso de diálogo público y privado, donde las personas definen quiénes son, cuáles son sus aspiraciones , qué es lo que necesitan y cómo pueden actuar colectivamente para alcanzar sus metas y mejorar sus vidas." (Rockefeller)
-