Please enable JavaScript.
Coggle requires JavaScript to display documents.
"El ministerio de la bondad", Ellen White, Cap. 4 - 5., El buen…
"El ministerio de la bondad", Ellen White, Cap. 4 - 5.
La verdadera religión
La religión pura es realizar obras de misericordia y amor.
La verdadera piedad se mide por la obra que se hace.
Un carácter como el de Cristo es la evidencia que hemos de mostrar.
El verdadero culto es trabajar juntamente con Cristo.
¿Somos los hijos de Dios?
Dios demanda que trabajemos movidos por principios verdaderos y permanentes.
Debemos representar a Cristo fielmente.
Dios no acepta espasmos emotivos de piedad.
¿Cómo brilla vuestra luz?
Nuestra luz no brilla lo suficiente.
El evangelio depende de la piedad personal.
Dios prepara nuestras vidas para toda buena obra.
No nos cansemos en el bien hacer.
Esto no debería ser una excusa para dejar de hacer el bien.
Nuestros esfuerzos aveces pueden parecer en vano.
La prueba de Dios de nuestra religión.
Los ángeles están vigilando.
Sentiremos un verdadero amor.
Dios moldea nuestro carácter al momento de ayudar.
La señal que distingue la religión verdadera de la falsa.
La verdadera simpatía distingue a los hijos de Dios.
Cristo hizo obra médico-misionera.
Misericordia: Mateo 9:13
Al hacer por otros estamos haciendo por Cristo.
Jesús se identifica con la gente que sufre. Mateo 25:41-46.
Muchas veces al ayudar o al hospedar personas, podemos estar auxiliando a los ángeles.
Nosotros al tener mas riquezas muchas veces nos hacemos más duros de corazón.
Definición de religión verdadera.
Santiago 1:27
Se reparte a los necesitados, se viste a los desnudos.
La compasión, la simpatía y el amor.
La simpatía práctica es la prueba de la pureza.
Es una prueba de la pureza y de la abnegación del corazón.
Satanás trata de anular el sentimiento de compasión en nosotros.
Pensar en nosotros en el benificio propio puede ser peligroso, como a Judas.
La parábola del buen samaritano
La verdadera religión desfigurada.
Existen personas que piensan que es degradante para su dignidad ministrar a la humanidad que sufre.
El sacerdote y el levita creyeron que, habiendo sido así honrados, no les correspondía ministrar a un hombre anónimo.
Fueron olvidados los principios de la ley de Dios.
Si el sacerdote y el levita hubieran respetado la ley que tanto amaban, no habrían pasado de largo.
Necesitamos entender quien es nuestro prójimo.
La ley de misericordia y bondad estaba claramente establecida en las escrituras del Antiguo Testamento.
Ilustrado con la parábola.
Con esta parábola queda establecido para siempre el deber del hombre hacia sus prójimos.
Nuestros prójimos son toda la familia humana.
El sacerdote como el levita profesaban piedad, pero el samaritano mostró que él estaba verdaderamente convertido
Condiciones para heredar la vida eterna.
Al no cuidar a los necesitados, estamos quebrantando el decálogo.
Si descuidamos a los necesitados, no tenemos segura la vida eterna.
¿Quién es mi prójimo?
Es toda alma que está herida por el adversario.
Es todo el que pertenece a Dios.
Es toda persona que necesita nuestra ayuda.
Vuestra oportunidad y la mía.
Dios insta a restaurar la imagen moral de Dios.
El que ama a Dios, manifiesta misericordia.
Cómo podemos amar a nuestros prójimos como a nosotros mismos.
Únicamente ése es el fruto genuino del cristianismo.
Solamente cuando amemos a Dios por sobre todo..
Ilustración de la naturaleza de la religión verdadera.
El egoísmo y la fría formalidad han apagado el amor que deberíamos mostrar.
A menos que practiquemos el sacrificio personal no somos cristianos.
No consiste en sistemas sino en la realización de actos de amor.
Los requerimientos de la ley de Dios son de mucho alcance.
Debemos cuidar hasta de los animales. Deut. 22:4
El dejar sin alivio el sufrimiento de nuestro prójimo es una infracción a la ley de Dios.
Cuando el Espíritu de Dios está en el hombre, él lo dirige para que alivie a toda criatura que sufre.
Creado por: Bryan Daniel Quispe Cipriano