Dos periodos de gobierno se dieron durante esta importante etapa histórica de México, uno de ellos fue el de Benito Juárez García, quien gobernó de 1867 a 1872, y el otro el de Sebastián Lerdo de Tejada, quien gobernó de 1872 a 1876. Ambos gobiernos dedicaron su esfuerzo por tratar de restablecer la paz social y política del país, así como la reestructuración e impulso de la economía minada por las revoluciones internas e intervenciones extranjeras. La República Restaurada sería la batalla ganada a los conservadores, por los liberales mexicanos, que sostenían para el país un gobierno republicano.