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LAS ESCUELAS ENTRAN A LA COMPETENCIA (Se confunde la inteligencia con la…
LAS ESCUELAS ENTRAN A LA COMPETENCIA
Se confunde la inteligencia con la madurez
los niños tienen acceso a demasiada información que logran un gran desarrollo intelectual
pueden ser muy inteligentes pero eso no quiere decir que sean maduros
ya que la madurez sólo se adquiere con la experiencia y los años
Surgen las recompensas
cuando le ofrecen una recompensa al niño con tal de subir de calificación, tiene una idea distorsionada de por qué estudia, su atención se enfoca en el premio y no en el proceso de estudiar
pero estudiar es un privilegio
la recompensa habitualmente se puede disfrazar de
estímulo
para que parezca algo más moderno y sotisficado
pero los niños recompensados se pierden las experiencias de esforzarse y sentir la satisfacción de lograr algo difícil
La carrera de ratas
algunos niños pueden con la presión de las escuelas, pero otros se ven afectados tanto emocional como físicamente
es importante conocer a los niños y no exigirles lo mismo, hay que tomar en cuenta a cada uno como el individuo único que es y decidir qué le conviene
desgraciadamente la educación se ha convertido en un negocio
El niño precoz
cuando hacemos que un niño deje atrás su mundo infantil y entre al mundo adulto, se siente impotente
cuando el niño pierde su inocencia, deja de confiar y se protege con cinismo y agresión
pues su desarrollo mental no concuerda con el emocional
ya que la información que recibe, la escucha, pero no la comprende
Sembrar la semilla del éxito
la palabra
éxito
tiene un lugar privilegiado en la actualidad
una persona para ser exitosa, es decir, para conseguir en la vida las metas que se propone y sentir satisfacción con lo que hace, necesita 4 habilidades
llamadas
pilares del éxito
:
enfocarse
para saber elegir lo que quieren, reconocer su vocación y valorar lo que cuenta
esforzarse
para dar lo mejor de si mismos y sentir la satisfacción de ir aprendiendo en el proceso
persistir
para no detenerse hasta conseguir lo que quiere y tener la fuerza para volver a intentarlo
paciencia
para saber esperar y confiar en que la vida les dará lo que merecen
Las escuelas entran en la competencia
cuando las escuelas se dejan presionar por los padres para complacerlos y no perderlos como clientes, están buscando su propio beneficio
las escuelas pierden su integridad
pero es difícil saber quién es el primer responsable de la presión escolar, si los padres que desean presumir a sus hijos o las escuelas que compiten para sobresalir
pero lamentablemente los que pagan el precio son los alumnos cuya salud emocional nadie toma en cuenta
Aparece el niño intelectual
el sistema educativo se cambió para demostrar lo antes posible la inteligencia de los niños, estén maduros o no
pero apresurar a todos los niños para presumir su capacidad, es no tomar en cuenta otras necesidades propias de esa etapa de desarrollo
ya que con esto los niños tienen problemas e aprendizaje y de atención
porque si estuviéramos haciendo lo correcto, los niños estarian jugando, contentos, sanos y relajados
el niño necesita una educación de corazón, con calor físico ambiental y calor de contacto humano
El niño calificación
en un sistema carente de valores que denigra y promueve una competencia insana entre los alumnos, todos pierden
ya que exhibir sus calificaciones, sean buenas o malas, es la peor forma de motivarlos
no es de sorprendernos que estos alumnos después presentes problemas de disciplina
ante el maltrato, algunos se deprimen, otros se rebelan, pero prefieren ser recordados como groseros y malportados a tontos
pero ¿quien nos ha hecho creer que nuestros alumnos son una calificación y que pueden ser medidos y comparados?
¿Esfuerzo es lo mismo que presión?
lo primero ayuda y lo segundo lastima
no presionar ni estresar al niño es no obligarlo a estudiar material sin sentido que aún no corresponde a su etapa de madurez
y aunque le pedimos que se esfuerce, es sin sentido y desmedido, pues no disfruta sus logros
es por eso que necesitamos despertar en él, el gusto por el esfuerzo
Vanessa Espinosa Muñoz, 2ºA.