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CRÍTICA DE LA RAZÓN PRÁCTICA
kant
.
La moral Kantiana
es puro formalismo
legal y legalidad pura; porque la norma carece de contenido y la Ley moral no se subordina a ningún fin
es rigorismo puro
La voluntad kantiana es la razón cuando no piensa lo que es sino lo que
debe hacer.
creyó que todo mundo atribuye valor absoluto sólo a la "buena voluntad".
partió de los juicios morales que espontáneamente
se producen en todos los hombres
la ley moral no necesita justificación, es categórica, aunque no podemos comprender por qué y cómo la razón pura es también práctica
La virtud hace
feliz al hombre
Separó la verdad y certeza teóricas de la verdad y certeza prácticas. Esto imposibilita prescribir al hombre un ideal moral de valor eterno y absoluto
distingue la voluntad pura inteligible de la voluntad sensible o emotiva
La voluntad sensible busca
el interés, la voluntad inteligible quiere la ley.
el fundamento o fuente de la obligación moral están en el mismo hombre; porque la obligación moral es la necesidad que todos tenemos de: unificarnos interiormente obligando a la sensibilidad a coincidir con la razón y con la voluntad pura inteligible.
La fe moral de Kant en los postulados de la razón práctica es distinta de la fe especulativa. Es una adhesión subjetiva. Es una creencia en realidades que son únicamente exigidas como condiciones de la vida moral
los actos humanos no son buenos ni malos; buena o mala
es sólo la voluntad del sujeto
Rousseau
Explica el carácter sagrado del deber por un "instinto divino': El deber kantiano aparece como una orden inapelable e irracional que cierra toda discusión. Este es el punto delicado de la Fundamentación de la metafísica de las costumbres
Arthur Schopenhauer
Para quien el deber kantiano es como Jehová, que no desciende a justificar las leyes que nos impone
La máxima universal reza así:
"Obra conforme a una máxima tal que puedas querer al mismo tiempo que ella se convierta en ley universal".
El fin moral
es querido en sí, por sí. Es un fin que debe ser sin ninguna condición
El ideal moral debe estar vigente para toda la humanidad. La máxima ordena cumplir el deber por el deber. El imperativo categórico descansa sobre la autonomía de la
voluntad, éste es, según Kant, un juicio sintético a priori y práctico
La ley moral es por fuerza meramente formal, sin contenido; porque cualquier contenido quita la universalidad a la ley moral