Las nubes están formadas por gotitas de agua de distintos tamaños. Esas gotitas de distintos tamaños producen una variedad de frecuencias dispersadas: las más diminutas dispersan más el azul que los demás colores; las gotas un poco mayo-res dispersan frecuencias un poco mayores, por ejemplo, el verde; y las gotas más grandes dispersan más el rojo. El resultado general es una nube blanca. Los electrones, cercanos entre sí dentro de una gotita, vibran juntos y en fase, lo cual da como resultado mayor intensidad de la luz dispersa que cuando la misma cantidad de electrones vibran por separado. En consecuencia, ¡las nubes son luminosas!Cuando la variedad de gotitas es mayor, absorbe mucha de la luz que les llega, y entonces la intensidad que se dispersa es menor. Eso contribuye a la oscuridad de nubes formadas por gotas más grandes. Si las gotitas aumentan más de tamaño, caen como gotas de lluvia.