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EL CONFLICTO (JESÚS ANTE LA LEY (Por encima y más allá de las exigencias…
EL CONFLICTO
LA LEY DE MOISES
Estas directrices eran cumplidas por cada judío dondequiera que estuviese. Sin estos comportamientos no se distinguían los judíos de otras gentes.
Por cumplir la ley murieron muchos, por ejemplo, los gobernantes griegos que quisieron cambiar las creencias, cultura y costumbres.
Para los judíos la ley era muy importante. Se la designaba en hebrero con la palabra Torá que significa “enseñanza”. Cuando hablamos de la ley, se refiere al conjunto de normas jurídicas, morales y rituales.
Atentar contra la ley era atentar contra el pueblo judío. El aprecio ante esta ley hizo que se rodease de interpretaciones incalculables como: mandamientos, prohibiciones y preceptos positivos.
LOS FARISEOS Y LA LEY
Un hombre era justo, era cuando tenía más méritos que pecados. Por eso, para compensar los pecados, hacían cosas suplementarias que ni siquiera estaban mandado hacerlas. Había que tener méritos ahorrados para pagar la cuenta de las deudas a Dios.
Dios sólo es amigo de los justos; por tanto, el fariseo no debe juntarse con los pecadores o los ignorantes de la ley, que mal la van a poder cumplir cuando ni siquiera la conocen.
Los fariseos eran el grupo que más trataban de cumplir la ley de forma escrupulosa y detallista. Ellos se consideraban el verdadero Israel y tenían a la ley como el gran don de Dios. En toda circunstancia creían conocer cuál era la voluntad de Dios.
JESÚS ANTE LA LEY
Por encima y más allá de las exigencias de la ley, Jesús piensa en las exigencias de un Dios que busca y quiere al hombre entero y no sólo sus acciones mecánicas exteriores.
Jesús afirma que no son los méritos los que salvan al hombre, sino la misericordia de Dios. Señala que la raíz del mal está en el corazón del hombre y radicaliza así la obediencia a Dios.
Para él, la ley tiene sentido en la medida en que está al servicio de los hombres. Jesús no ajusta su conducta a unas normas escritas.
Habla de la ley con un tono de absoluta autoridad y se permite perdonar los pecados, cosa que sólo Dios puede hacer.
No fue alguien que hiciese una campaña contra la ley, pero siempre manifestó que ella no constituía la norma absoluta y exclusiva del comportamiento de los hombres.
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