En la primera etapa, los bebes emiten palabras aisladas que a menudo parecen representar el valor en significado de un enunciado entero (Es decir, holofases). Al principio, el vocabulario productivo del niño esta parcialmente restringido, por la extensión y variedad de los sonidos que puede pronunciar, de modo que sus primeras palabras pueden ser solo inteligibles para sus acompañantes cercanos; por ejemplo, "abe" (por "abuela) o "ero" (por "quiero", cuando el niño señala una galleta). Los sonidos que comienzan con consonantes y terminan con vocales son mas fáciles para los bebes, cuyas palabras mas largas a menudo son repeticiones de las silabas que pueden pronunciar (Por ejemplo, "mama, "tata).
Sin embargo, el desarrollo fonológico ocurre muy rápido. Para mediados del segundo año, las pronunciaciones lindas y creativas de los bebes ya son guiadas por reglas, o estrategias, que les permiten producir versiones simplificadas pero mas inteligibles de las palabras adultas.
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