Hereditarios: Como la distrofia muscular de Duchenne, la distrofia muscular de Becker, la parálisis periódica familiar, la distrofia muscular de la cintura escapular,) Endocrinos: Como la acromegalia (crecimiento excesivo debido a la sobreproducción de la hormona del crecimiento), el síndrome de Cushing, la diabetes mellitus, el hipertiroidismo (una glándula tiroidea hiperactiva) y el hipotiroidismo (una glándula tiroidea poco activa). Inflamatorios: como infecciones (generalmente víricas) y polimiositis y dermatomiositis Metabólicos: como las enfermedades por depósitos de lípidos y deglucógeno, alcoholismo e hipopotasemia (concentraciones bajas de potasio)