El Estado Social de Derecho da un paso más allá del Estado Liberal y comprende que no solo debe trabajar por la garantía y el goce efectivo de los derechos individuales, sino que a la vez debe prevalecer los derechos sociales por encima de todo. El maestro Carlos Gaviria lo explicaba con contundencia. Señalaba que, si bien los derechos individuales hacían un énfasis en la libertad individual, la autonomía, la libertad de pensamiento, la libre expresión y el respeto a la vida, estos derechos no eran suficientes para vivir una vida digna. Por eso, se hacía necesario comenzar a garantizar una serie de derechos sociales que dieran plenitud a la vida humana como el derecho al trabajo, a la salud, a la educación, etc. En síntesis, el derecho a la vida parece vacío si no viene acompañado de una garantía adicional a derechos sociales básicos.