Se define como el proceso por medio del cual los niños y las niñas adquieren conductas, creencias, normas morales y motivos que son el objeto de aprecio de la familia, de los grupos culturales a los que pertenecen, sin olvidar que son los padres los agentes primarios de tal transmisión (el desarrollo social del niños se da principalmente en cuatro ejes: familia, escuela, comunidad y los amigos)