Según Lázaro J. & Hernández, R (s.f): el protocolo es la agrupación, ordenada y numerada, de los documentos originales y otros agregados, si procediere, según el caso, que el notario redacta y autoriza cada año natural, colocándolos en una área donde debe conservarlos intactos, en perfecto estado, protegidos del acceso de terceros no autorizados, con el fin de que perdure su existencia en el tiempo, para garantizar la seguridad jurídica