Se basan en frecuencias, por ejemplo el número de unidades defectuosas. En estos gráficos el control del proceso se realiza si el producto inspeccionado se clasifica como no conforme o conforme (defectuoso o no defectuoso), respecto a las especificaciones para la característica de calidad considerada. Ejemplo: un tornillo es conforme si su longitud está entre 1,9 y 2,1 cm., en caso contrario será no conforme.
Los gráficos de control por atributos tienen la ventaja de sintetizar de forma rápida toda la información referida a diferentes aspectos de calidad de un producto, ya que permiten clasificar éste como aceptable o inaceptable; además, no suelen necesitar de sistemas de medición muy complejos y son más fácilmente entendibles por los no especialistas.