Crear centros de interés, concentrando la enseñanza en torno a temas atractivos para los alumnos. Los contenidos deben estar relacionados con: las necesidades primordiales del niño (alimento, protección, contra la intemperie y los peligros, descanso y diversión); con su ambiente (familia, escuela, sociedad, plantas, animales, agua, aire, sol, etc.)