La electrificación de comunidades rurales aisladas requiere una voluntad posítiva clara de facilitar el acceso a los más necesitados.Para ello, es imprescindible disponer de un marco institucional y regulatorio que sea favorable. En la mayoría de los casos, la legislación no contempla la electrificación mediante sistemas aislados de red, lo cual representa su primera barrera. Como mínimo, es necesario que el marco institucional y regulatorio contemple la electrificación mediante estos tipos de sistemas como una alternativa en igualdad de condiciones respecto a la electrificación mediante extensión de redes, Y preferiblemente, dicho marco debería favorecer la electrificación mediante no convencionales en aquellos casos en los que no sea factible la electrificación mediante extensión de redesExisten diferentes herramientas y tecnologías de planificación que permiten identificar, según sus características, que viviendas deben ser electrificadas con extensión de redes, cuales con microrredes y cuales mediante sistemas domiciliarios, para conseguir una optimización económica en un plazo de tiempo.A este concepto, en el que se incluyen las diferentes tecnologías de electrificación rural disponibles hoy en día, se le ha denominado "planificación integrada", y es especialmente interesante en el caso de islas donde las energías convencionales resultan muy onerosas.La transferencia de tecnologías, conocimientos y experiencias en planificación integrada de la electrificación rural deben ser objeto de cooperación internacional.