Afecta a un bien inmobiliario de propiedad del solicitante de crédito, en forma de prenda o hipoteca.
La prenda se hace sobre bienes muebles (vehículos o maquinarias, equipo) y la hipoteca, sobre bienes inmuebles (terrenos, edificios, galpones, etc.).
Ambas son operaciones con formas de contratos reguladas por la ley.