Aún teniendo una descripción completa de todos los átomos del universo, no podemos deducir a partir de esta descripción fenómenos a otras escalas, tales como la vida, la mente, los sueños, la imaginación, el segundo concierto para piano y orquesta de Rajmáninov, una novela de Murakami, una revolución. Todos estos fenómenos son reales, pero no pueden ser descritos a partir de “leyes” de partículas “elementales”. No son reducibles.