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Teología del cuerpo (Principios fundamentales (p) El amor humano está…
Teología del cuerpo
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ñ) La concupiscencia y el pecado mutilan la relación de la persona consigo misma, con Dios y con los demás; deforma su finalidad y la ciega a la verdad de sí misma.
n) El acto sexual adquiere su sentido y significado plenos únicamente dentro de la alianza perpetua de amor entre un hombre y una mujer: el Matrimonio.
m) La sexualidad trasciende el acto sexual, abarca casi todas las expresiones de la persona.
l) La sexualidad es una dimensión de la persona, que configura su modo de relacionarse consigo misma, con Dios y con los demás.
k) La libertad no es absoluta, es más bien el espacio donde el Amor se expresa en la Verdad.
j) Todo lo anterior determina la dignidad última de cada persona, y establece el principio de sus derechos y responsabilidades
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h) La persona es, por su naturaleza, un ser en relación con los demás.
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a) La persona es creatura, hecha a imagen y semejanza de Dios
2.- Ciclos
La Teología del cuerpo señala los reduccionismos que la sociedad hace en relación al hombre, y por otro lado presenta la Revelación divina como punto de reflexión para una antropología integral.
Primer ciclo: El principio
Comienza con la reflexión del del origen o forma original. Parte de la reflexión sobre el texto de Mt 19, 3ss y las narraciones sobre la creación del hombre (cf. Gn 1, 26-31 y Gn 2, 7-25) para mostrar la vida del hombre antes del pecado y el designio divino en relación con él pues a ese "principio" se refiere Jesús. Hombre y Mujer los creó
Segundo ciclo: La redención del corazón
La reflexión del Papa Juan Pablo II se trasladó a otro texto evangélico: el de la extensión del adulterio (cf. Mt 5, 27-28) a la luz de toda la Biblia y de la historia de la salvación.
Tercer ciclo: La resurrección de la carne
Según recuerda Jesús, en la resurrección los hombres serán perfectamente personas porque verán a Dios. El Papa recuerda las conclusiones de los ciclos anteriores, en especial la del significado esponsal del ser hombre y del ser mujer que indica la vocación de la persona humana al don, al darse que será pleno tras la resurrección de los cuerpos.
Cuarto ciclo: La virginidad cristiana
Jesús recuerda también al hombre la verdad del cuerpo y su naturaleza de don. De ahí se presenta la virtud de la pureza como sustancia misma del ethos de la redención del cuerpo. La pureza para Juan Pablo II implica continencia, dominio de la propia concupiscencia pero también y mediante ésta restablecer el sentido y vivencia del propio cuerpo como don personal
Quinto ciclo: El matrimonio cristiano
Las reflexiones del Papa Juan Pablo II parten de un texto de san Pablo (Ef 5, 22-33): el matrimonio ha de ser entendido sí, primero como parte de un plan originario de Dios pero luego también a la luz de la redención y como cumplimiento del amor de Cristo por la humanidad, por la Iglesia
Sexto ciclo: Amor y fecundidad
El Papa Juan Pablo II recuerda explícitamente las enseñanzas de la encíclica Humanae Vitae iluminándolas con las reflexiones desarrolladas en las catequesis anteriores: El acto conyugal «significa» no sólo el amor, sino también la fecundidad potencial, esta apertura a la vida hace de la sexualidad, un acto que une a la pareja con Dios.
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1.- Preliminares
Definición: Consiste en la explicación formal de la doctrina Católica en relación con el hombre, su naturaleza, su relación con la sexualidad y su cuerpo.
Fue formulada por san Juan Pablo II, durante su pontificado, vió la necesidad de proponer una reflexión filosófica. Lo hace en 129 catequesis que explicó cada miércoles, entre 1979 y 1984.
El punto de partida es la creación: el ser humano ha sido plasmado como hombre y mujer. A partir de esa reflexión se llega a una visión integral que permite una respuesta adecuada al problema del matrimonio y de la procreación. Por tanto, se trata de establecer lo que Juan Pablo II llama una “antropología integral” o mejor una teología del cuerpo.
La Teología del Cuerpo surge como respuesta desde la Biblia, la doctrina y el Magisterio, ante la pregunta fundamental de la relación del cuerpo con la felicidad del hombre.
Busca liberar de las opresiones de sistemas que deshumanizan y destruyen la esencia de la persona, y con ello la pierden en la infelicidad.
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