Se trata de transformar los signos impresos en palabras leídas, Constituye, antes que nada, un proceso secuencial muy rápido de ciclos analítico/sintético//analítico/sintético. Primero, desarma la palabra en sus componentes primarios, en pequeños eslabones elementales, que los lingüistas denominan, precisamente, fonemas (o su equivalente gráfico, los grafemas: L-e-c-t-u-r-a). Inmediatamente después de haber desarmado e identificado los fonemas o grafemas, el mecanismo fonético re-compone los fonemas en unidades silábicas: Lec//tu//ra; hasta alcanzar la palabra completa. Recomienza el ciclo con la palabra que continúa. Reduce la palabra a sus componentes primarios: f-o-n-é-t-i-c-a. E inmediatamente después, el intervalo de tiempo entre ambas operaciones es de milisegundos, los suelda en unidades silábica: fo//né//ti//ca// fonética.