Inicia cuando los hermanos Cordel y Acidal Colacho aparecen como dueños de una tienda de comercio de taque, aldea de los Andes. Pero su negocio prospera cuando se relacionan con la alta sociedad y cuando una transnacional norteamericana empieza a explotar una minas cercanas a Taque. Entonces es allí, donde los hermanos abren un gran bazar y adquieren la exclusividad comercial con la minera; se dedican además a la contrata de peones para la mina, y arrebatan las tierras a los indios soras, entre otros abusos. Se convierten en patrones pero no contentos con ello, aspiran a altos cargos políticos, para lo cual se esfuerzan en adquirir los gestos de los ciudadanos cultos, pese a la ignorancia de ambos. No obstante, su trayectoria política se dispara, apoyados por el dinero de la trasnacional; llegan a la capital, hacen campaña política y por medio de una asonada revolucionaria, Cordel Colacho termina por convertirse en Presidente de la República. Consciente de ser una figura del imperialismo yanqui, se inclina servilmente a los intereses de los Estados Unidos, pero eso no le salva de ser destituido por el golpe de estado del general Colongo