Obstrucciones ureterales extrínsecas por: enfermedades intestinales (plastrón apendicular, enfermedad de Crohn), ginecológicas (masas anexiales, abscesos tubo-ováricos), retroperitoneales (fibrosis, linfomas, abscesos), vasculares (aneurismas aortoilíacos, uréter retrocavo) o complicaciones posquirúrgica.