En la sociedad del consumo, las empresas, a través de las pautas publicitarias, inducen al consumidor a adquirir bienes y servicios que realmente no necesitan. Se generan, en forma inconsciente, necesidades y se impone el sentido de pertenencia. Es decir, adquirir bienes para “pertenecer” y se divide al mundo entre los seres humanos que tienen y los que no tienen.