Hay que preguntarse que posición se ocupa en la mente de los consumidores y qué posición se quiere ocupar, pero para esto es básico entender cómo las palabras afectan a la mente, hay que manipularlas y al escoger las adecuadas, se puede influir en el proceso mental.
Se necesita valor, simplicidad, sacrificio y paciencia, pero lo importante es tomar la iniciativa.