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LA JUVENTUD DE JESÚS
- Cuando era un adulto joven, entregó su espíritu y empezó su misión, dando luz a quién lo necesitó, dejando el misterio de redención.
- Al resucitar, nos ha enseñado que la vida vale la pena, que hay que vivirla de forma en que hayamos sido buenos, vencer nuestros temores y al envejecer no arrepentirse de nada.
- En plena adolescencia Jesús estaba en crecimiento espiritual, conectandose con El Padre, pero no renegaba a sus padres ya que crecía en un ambiente de amor.
- Jesús vivió libremente, es decir, mientras sus padres estaban en la peregrinación el Jerusalén, Jesús jugaba con sus amigos, escuchaba las narraciones de los adultos, etc, estando en el pueblo de un lado a otro.
- Desde pequeño, emezo a realizar sus misiones con pequeñas acciones, y fue pueato a rueba para mirar que tan leal era a Dios, y al superarla era el comienzo de su vida.
- Jesús se fue preparando para cumplir con el proyecto que Dios tenía para él, orientandolo a esa misión suprema.
- Cuando Él fue bautizado, Dios le hizo saber que era su hijo amado, dando inicio a las misiones que realizaría para que la gente fuera debota a Dios y aprendiera de Él, desde las predicciones hasta las ssalvaciones.
- En su juventud Jesús se relacionaba normalmente, es decir, era un niño normal en un pueblo llamado"el hijo del carpintero", ya que su padre era carpintero, pero nadie lo miraba raro, y cuando salió apredicar la gente se preguntaba de donde venía su sabiduría.
- Este hecho de la vida de Jesús inspira a los jóvenes a prepararse bien para su proyecto, además de ser concientes de que somos uno más en la familia y en el "puelo".
- Jesús nos guía en nuestra jueventud, recordandonos que tenemos que ser buenos, sin necesidad de mostrar actos de rebeldía o desorden, al contrario, quiere que respetemos a los demás y nos reconoscamos.
- Jesús nos invita a permanecer ese brillo de jóvenes en nuestros corazones, hacerlo notar como estrellas y ser luz de esperanza y de guía en la noche. Ya que Él es la estrella radiante de la mañana.
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