Se establece que la actividad es una noción muy amplia que expresa todo el dinamismo de la naturaleza humana; el trabajo tan sólo es una de ellas, al lado de las actividades desarrolladas en las esferas doméstica, educativa, cultural, deportiva, sindical, política, etc.
Cuando el trabajo así definido se ejerce para obtener ingresos, en calidad de asalariado, de empleador o aun actuando por cuenta propia, estamos en presencia del empleo, que puede desarrollarse en el ámbito mercantil o en actividades sin fines de lucro
De esto se deduce que todas las personas que emprenden una actividad laboral, por eso mismo están ocupadas, lo cual no significa que tengan un empleo asalariado.