Jerarquía Cameron y Quinn fundamentan esta clase de cultura en los atributos clásicos de la burocracia de Max Weber: reglas, especialización, "meritocracia" (supervisión mediante premios y sanciones), jerarquía, propiedad separada, impersonalidad y responsabilidad. Tales características fueron adoptadas por empresas e instituciones cuyo mayor reto fue generar eficiencia, confiabilidad, flujos planos у resultados predecibles. En los años sesenta se consideró el ideal de toda compa nía, debido a que la burocracia conduce a la estabilidad, la eficiencia y una fuerte consistencia en la producción de bienes y servicios. Desde luego, el ambiente era relativamente estable y las tareas y funciones podían ser integradas y coordinadas. Además, era posible mantener la uniformidad en los productos y los empleados, y sus trabajos son controlables. Las líneas claras en la toma de decisiones, la autoridad, las reglas y procedimientos estandarizados, el control y los mecanismos de responsabilidad fueron considerados como las "llaves del éxito".