La cultura azteca era una sociedad bastante avanzada para la época, que se apoyaba en la infraestructura para organizar la ciudad y aprovechar al máximo las actividades económicas.Una muestra de la capacidad arquitectónica azteca y del orden que promovía es Tenochtitlán, la mítica capital antecesora de Ciudad de México.El desarrollo arquitectónico de esta histórica localidad se caracterizaba por la simetría, los diseños geométricos, los bajos relieves, los grandes murales y las plazas.