Las lesiones cutáneas suelen consistir en un exantema maculopapular de límites indefinidos que experimenta excoriación secundaria, úlceras descamativas y liquenificación, además de adenopatías entre pequeñas y medianas. Formación prematura de arrugas, atrofia cutánea, agrandamiento de los ganglios linfáticos inguinales o femorales, obstrucción linfática, hipopigmentación en parches y edema y eritema localizados.