El polo negativo tiene un efecto neuroestimulante, con la corriente galvánica, la excitación nerviosa es difícil de conseguir, al igual que la discriminación entre fibras sensitivas grandes, fibras motoras y fibras que conducen el dolor,por esta razón la corriente galvánica se utiliza como terapia previa a los tratamientos con corrientes variables, en los casos de parálisis periféricas. Bajo el polo positivo, la corriente galvánica tiene un efecto hipoestésico, sedante y analgésico, que se utilizará terapéuticamente en los casos en que el dolor está provocado por estructuras superficiales.