Con su inclinación al análisis racional, fue el primero en articular una teoría completa del método de diseño. No obstante, fue él quien enunció el método de manera coherente, atractiva y muy detallada. De hecho, la suya es casi la única teoría en este sentido, pues no ha sido sustituida por ninguna otra y permanece en gran medida intacta, incluso en la arquitectura actual. En realidad se ha ajustado y alterado, y la mayoría de los arquitectos que la utilizan hoy en su trabajo diario no son conscientes de su origen, aunque sigue siendo una de las contribuciones más importantes de Viollet-le-Duc a la teoría de la arquitectura. Este método de proyectar un edificio, descrito paso a paso en su Historia de una casa (París, 1873), es la base intelectual para organizar y poner en práctica los principios teóricos