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Autentificación de la pretensión mesiánica de Jesús. (¿Qué significó para…
Autentificación de la pretensión
mesiánica de Jesús.
Resurrección: paso de la
cristología implícita a la
cristología explícita.
Hay una correspondencia de la
confesión de fe comunitaria de
Jesús como Dios, con una triple
aspiración o pretensión de Jesús:
ocupar un puesto central y único en la
instauración del Reino de Dios por El
proclamado y siempre vinculado a su persona;
anticipar ese Reino por medio de parábolas,
prodigios y señales, con preferencia por los
pobres, pecadores, marginados, desfavorecidos.
ser la Palabra de Dios en persona, arrogándose
su “autoridad” (exousía).
El acontecimiento de la resurrección
no constituirá para los discípulos
una ruptura con el pasado.
sino por el contrario, dale su sentido
más profundo y trascendente, por
considerarlo desde la Pascua bajo la
nueva luz recibida por la efusión del
Espíritu Santo.
¿En qué consiste la
resurrección de Jesús?
No es solamente la reanimación del
cadáver, sino la adquisición de una
condición de vida gloriosa y
verdaderamente humana, es decir,
gloriosa, espiritual corporal.
La resurrección de Jesús incluye, además,
su exaltación a la derecha de Dios en los cielos.
El Padre sale en su ayuda y lo resucita por
el Espíritu, coronándole de gloria y dignidad.
¿Qué significó para
la Iglesia primitiva?
En la resurrección acontece una
novedad que “afecta” a Dios.
La iniciativa corresponde al Padre.
El verbo “resucitó”, manifiesta la
situación pasiva de Jesús, que
recibe la acción divina renovadora
del Espíritu.
En el misterio pascual
quedan “caracterizados”:
el Padre que confirma o constituye al Hijo
Jesús que es ungido y constituido en poder
el Espíritu Santo que realiza este
acontecimiento escatológico
La resurrección marca un comienzo
de un nuevo tiempo, el tiempo del
Espiritu Santo: la Iglesia.
Nuevas interpretaciones de
la resurrección de Jesús
Pannenberg
Sólo en Cristo y por Cristo, recibe
sentido toda la historia, constituyendo
su venida el fin de la historia
La Cruz y muerte de Jesús puso
en crisis su mesianismo, la
resurrección fue la autentificación
de su misión salvadora.
Moltmann
Jesús, al dar cumplimiento a las
promesas del AT por la resurrección,
abre un nuevo eón.
La resurrección es la más clara
constatación que al final el
verdugo nunca quedará por
encima de la víctima.
Cristo es nuestra justicia y quedará
incompleta su resurrección mientras
siga sufriendo injusticias en sus
hermanos los hombres.