Diversas investigaciones en torno a la energía nuclear, de las que participaron algunos de los más grandes científicos de la historia (desde Becquerel o Marie Curie a Otto Hahn, entre otros), comenzaron a llevarse a cabo ya desde finales del siglo XIX.
En el año 1942 se construyó el primer reactor nuclear del mundo, en el llamado Proyecto Manhattan, con el se buscaba unan nueva fuente de energía que supuestamente no contaminaría, era más que eficiente e incluso parecía ser casi ilimitada.