Determinan que las relaciones sociales
son aún más importantes que las sexuales, lo cual admite que tener buenos vínculos familiares y amistosos son benéficos tanto para la salud mental como la física, porque si comparamos con adultos aislados, veremos que tienen más
probabilidades de morir de enfermedades cardiovasculares, accidentes o suicidios. Además de ser parte importante para la vida de los adultos maduros, las relaciones sociales se tornan exigentes de manera estresante y exigente, principalmente para las mujeres, ya que cuentan con más demandas y repercusiones psicológicas; lo cual deriva una mayor susceptibilidad a la depresión o las vuelve menos satisfechas. En relación al matrimonio, la satisfacción conyugal mejora cuando los hijos son