El arte bizantino utilizo abundantemente el color dorado, con éste, representaban el cielo. La pintura alcanzó su mayor esplendor durante el siglo XIV, anterior a esta fecha, era en realidad un poco escasa. Veneraban los iconos y las pinturas religiosas elaboradas en tablas.
Todos los iconos que pintaban eran colocados en las iglesias para que pudieran ser venerados por sus fieles y de esta manera buscaban como representar a Cristo, a los santos y a la Virgen. Destacaron los frescos, pinturas en paredes de las iglesias y en panele